En cuanto a las vivencias comunitarias, compartimos la experiencia de nuestros novicios en España.
El mes de julio en el noviciado lo hemos vivido muy intensamente pues ha estado lleno de muchas actividades que nos han enriquecido grandemente. En los primeros días del mes, los novicios Bernardo y Esteban fueron examinados por el tribunal correspondiente, para poder evaluarles del noviciado así como para poder tener derecho a optar a solicitar la primera profesión. Ellos se prepararon arduamente y ambos fueron aprobados para la profesión, que Dios mediante la realizarán el 2 de septiembre en Caleruega.
Como parte de la formación del noviciado el maestro y el sub maestro, dispusieron unos días en los que hemos podido peregrinar a algunos lugares dominicanos para poder llenarnos espiritualmente y seguir profundizando en este caminar del noviciado. De esta manera el día 13 de julio emprendimos el viaje a Caleruega, ese mismo día iniciaba el encuentro de la familia dominicana de la provincia de Hispania, del cual nosotros también participamos. Esta fue una experiencia enriquecedora en la que se pudo evaluar el caminar de la provinci
a en el tema de los jóvenes. Así mismo pudimos conocer a muchos hermanos y hermanas de las diferentes ramas de la familia.
A partir del día 16 continuamos con nuestro peregrinaje visitando varios de los lugares en los que estuvo Nuestro Padre Santo Domingo o bien, que tenían relación con él. Durante toda la semana pudimos visitar Aza (o Haza), lugar donde nació la Beata Juana. También estuvimos en el pueblo de Peñafiel, donde reposan los restos de la Beata. Al siguiente día tuvimos un recorrido detallado de Caleruega en el que conocimos a profundidad el pueblo, el convento y el antiguo torreón. El día 18 pudimos conocer la Catedral del Burgo de Osma, este fue un momento muy especial pues en este lugar, Santo Domingo, fue canónigo y pudimos meditar acerca de esta etapa de su vida. El jueves 19, fue programada una visita a los monjes del Monasterio Benedictino de Santo Domingo de Silos, lugar donde según la tradición la Beata Juana acudió, luego del sueño que tuvo. Este encuentro con los novicios del monasterio estuvo lleno de muchas vivencias, pues les autorizaron salir de la clausura y compartimos con ellos una comida fraterna en un campo cercano.
El siguiente día pudimos compartir con las monjas de Caleruega la misa y un desayuno en el claustro del monasterio, posteriormente nos mostraron el mismo y el museo. Ese mismo día por la tarde fuimos Gumiel de Izan, lugar en el que Santo Domingo estudio con su Tío arcipreste y obtuvo su formación inicial en letras y espiritualidad. Durante el fin de semana pudimos conocer la antigua ciudad romana de Clunia, así como compartir una cena con las hermanas Dominicas de la Enseñanza. Finalizamos nuestra estancia en Caleruega con una oración en torno al pozo de Santo Domingo en el Monasterio de Caleruega.
