Estimados hermanos y monjas de la Orden:
Con gozo llegamos al mes de Octubre, y particularmente nos alegramos por la tan esperada canonización de nuestro pastor y mártir San Romero de América. Aunque para el pueblo de Dios y para humanidad, Monseñor es un santo, el 14 de octubre marca un verdadero Magníficat para la memoria histórica. Dios mediante los hermanos de los diferentes Consejos de Provincia a realizarse en San Salvador, asistiremos a este momento importante para la Iglesia salvadoreña y celebraremos juntos este magno acontecimiento.
Monseñor Romero nos recuerda esa tenacidad por la justicia y por la paz, asuntos necesarios para todos los pueblos donde realizamos nuestra predicación compasiva y misericordiosa. En estos meses nuestra región provincial se ha visto asaltada por situaciones sociales que han puesto en tensión la realidad de Guatemala, Nicaragua, Costa Rica entre otros. Nuestra cotidianidad se ve irrumpida por brotes de violencia y sin lograr la solución de conflictos que viven nuestros países. Dios quiera que la tan anhelada paz y justicia que llevó a la entrega generosa del Obispo Romero, sea lo que él mismo decía «semilla de libertad para nuestros pueblos»; en la misma celebración recordaremos otro hombre de talla evangélica: Pablo VI.
En este «Sentir con la Iglesia», deseamos unirnos al Papa Francisco en el Sínodo con la Juventud que tendrá a lugar en Roma durante el mes en curso. Este Sínodo en correlación con el anterior al Sínodo de la Familia «pretende acompañar a los jóvenes en su camino vital hacia la madurez, de tal forma que por medio de un proceso de discernimiento, puedan describir con alegría su proyecto de vida así como ayudarles a describir su apertura del encuentro de Dios con los hombres». a esta reflexión la provincia trabajó en un documento emanado en la formación provincial de enero de 2018 una reflexión al respecto motivada por el Maestro de la Orden, quien dirigió a la familia dominicana una carta al respecto.
Octubre también nos invita a acoger y celebrar a tantos peregrinos quienes asisten a nuestros lugares de culto para la celebración mariana del mes del Santo Rosario, de manera especial en Guatemala y en el recuerdo de los 175 años del Patronato de la Virgen del Rosario sobre la ciudad de San Salvador. Nos unimos a los hermanos en este arduo trabajo de acompañamiento en el campo de la espiritualidad popular y una oportunidad para penetrar esos misterios del Rosario en los misterios de nuestra vida.
Así mismo, comunión de oraciones por la Asamblea Mundial del Laicado Dominicano a realizarse en Fátima, Portugal, los días 3 al 11 del mes en curso, pedimos al Señor que este encuentro ayude a discernir los caminos que nuestros laicos asociados realizan en la misión de la Orden de Predicadores y que abarcará distintos tópicos para la pertinencia de su misión, en el encuentro estarán miembros de la Curia General y el Maestro de la Orden.
Que este mes sea una verdadera acción de gracias por el don de nuestro discípulado al servicio del Reino, como lo hizo María fiel compañera en la predicación de su Hijo,
Fray Carlos Antonio Cáceres OP
Prior Provincial
